Quien tiene un fantasma tiene un tesoro: 5 Airbnb’s encantados donde nadie consigue pegar ojo

Cada vez que nace algo nuevo en este mundo siempre aparece gente que pretende forzar la máquina al máximo, llevándola al límite y dedicándose a explotar los rincones más inexplorados de cada engranaje del concepto maquinado.

En una de esas noches de inspiración, probablemente a algún hipster trasnochado con madera de emprendedor, se le encendió una bombilla en algún lugar recóndito de su cerebro mientras decidía qué ver en Netflix para echar una noche de martes. Dándose un garbeo por la exhuberante oferta de series y pelis prometedoras, logró detectar un patrón entre los títulos más de moda del momento. Stranger Things, American Horror Story, Scream o The Killing; son solo algunos ejemplos de los miles que constatan que el terror está de moda (aunque quizá nunca había dejado de estarlo del todo).

Hilando un par de ideas y atando algunos cabos sueltos, el hipster consigue unir dos conceptos trillados en uno y dar a luz a la quinta esencia de la economía colaborativa alternativa (aún más si cabe); hagamos Airbnb’s de casas encantadas.

La gente quiere pasar miedo, prefiere ganar en experiencias o en arritmia cardíaca si hace falta, pero la rutina no es una opción. Habrá a quien le parecerá descabellado o una idea horrible, pero Airbnb es de esas empresas que se apuntan a un bombardeo y este hasta lo ha comprado.

Aprovechando las lindezas de la sabiduría popular, las leyendas sobre brujas y fantasmas en los pueblos perdidos, algunos propietarios han decidido darle la vuelta a la tortilla y poner su casa maldita como un alojamiento turístico en Airbnb. Si antes la gente huía de las viejas casas donde había muerto alguien en extrañas circunstancias, quedando muchas veces abandonadas y desterradas del catálogo de cualquier inmobiliaria, hoy se paga la friolera de hasta 200$ por noche para hospedarse en algún inmueble desvencijado, con retratos de antepasados de finales del siglo XIX, muñecos de voodoo o álbumes de familias enteras que pasaron a mejor vida y las fotografiaron como si estuvieran tomando el té de las cinco.

En este post te dejamos las 5 casas vacacionales más encantadas y pintorescas de Airbnb en las que los propietarios optaron por una gestión de alojamientos turísticos diferente y consiguieron maximizar sus ingresos de la forma más macabra.

La casa de Talliston, en Great Dunmore, Essex

Una casa decorada al estilo Art Nouveau Escocés de lo más escalofriante. Se dice que el dueño de aquella casa, el hijo de una familia noble escocesa, se recluyó en Essex huyendo de Glasgow después de haberse desfigurado la cara con aceite hirviendo y haber sido rechazado por su amada. Pronto se convirtió en un ermitaño que hablaba con la casa, las paredes le susurraban y murmuraban cosas horribles hasta que acabó suicidándose. ¿Esquizofrenia o algún espíritu demoníaco? El propietario ni lo sabe ni le importa.

The Mannor, en alguna parte no demasiado lejos del pequeño pueblo de St.Paul, Minnesota

Una casa que siempre ha tenido ese halo de misterio en el pueblo de St. Paul, con mil historias y ninguna concreta, de gruesos muros de piedra y un doberman guardián, al más puro estilo de la casa de los Baskerville.

La mansión Parks Bowman en Nueva Orleans

La casa de las maldiciones voodoo alzada en un terreno en el que una vez hubo un cementerio cajún, construida por un francés en la primera década del siglo XX. Hay quien jura que se escuchan voces profundas de blues de los esclavos negros de Nueva Orleans que habían sido enterrados en aquel cementerio, amontonados sin ni si quiera un apellido y un par de palos atados en forma de cruz. La vejación no se limitaba a la dura servidumbre en vida, sino que cuando aquel francés construyó sus cuatro paredes destrozando la poca dignidad de semejante necrópolis, les arrebató la triste tranquilidad que sólo alcanzaron con la muerte; y ahora, todavía condenados, lloran sus eternos blues en la gran casa de la esquina de Parks con Bowman. Con Wi-Fi, piscina y resquicios de santería por el módico precio de 100$ la noche

La cámara de la locura de York, Yorkshire, Reino Unido

Situada en la ciudad de origen romano de York, con más de 600 años de historia y llena de antigüedades, se dice que por sus pasillos vagan los fantasmas de las personas que habitaron la casa cuando era un hospital psiquiátrico gestionado por una orden religiosa. Se dice que eran maltratados y que muchos perecieron por la falta de cuidados y por las enfermedades mentales en estado demasiado avanzado. Una jauría de lobos donde se mataban unos a otros por un pedazo de pan, y un alojamiento con 125 visitas de interesados en la última semana y mucho que decir.

La casa donde nació Donald Trump

Vale, no es exactamente una casa encantada, pero da bastante miedo. Esta casa situada en el barrio de Queens vio nacer al presidente de los Estados Unidos,  Donald Trump y se alquila en Airbnb por 725 dolarazos la noche. Está llena de fotos históricas de la familia Trump, fotos de la infancia del pequeño Donald y una foto en cartón a tamaño real del magnate. Escalofriante, ¿no?

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